La tecnología sin duda ha revolucionado nuestra vida personal y laboral. También ha posibilitado nuevas formas de trabajo, mucho más colaborativas y flexibles, orientadas al mundo digital. Ha generado nuevas oportunidades, y planteado nuevos retos.
Uno de ellos es el trabajo en remoto o la creación de espacios de trabajo virtuales. Entornos online, de trabajo colaborativo, en el que los empleados no están presencialmente e interactúan a través de una red privada o internet. Las nuevas oficinas ya están aquí.
Más ventajas
En un principio, esta forma de trabajar no fue bien acogida en el sector laboral, debido a que se pensaba que era una vía para que los empleados trabajasen menos a causa de la falta de supervisión. Nada más lejos de la realidad, con el paso del tiempo, se ha demostrado que esta falta de supervisión no es tal, y que más que desventajas, el entorno virtual de trabajo ofrece numerosas ventajas. La oficina virtual es posible, y aquí te traemos cinco ventajas para implantarlo:
- Reducción de costes de oficina. El lugar de trabajo virtual ha permitido que las empresas reduzcan sus gastos de infraestructuras al necesitar menos espacio físico para sus empleados.
- Reducción de gastos de desplazamiento en tiempo y dinero.
- Se reduce el absentismo. Esta forma de trabajo puede eliminar el absentismo laboral al no ser necesario estar en un sitio físicamente para poder trabajar. El empresario consigue que su empleado no se pierda días laborables y el trabajador, en caso de estar enfermo y tener un asunto urgente, no precisa de desplazarse a ningún lugar.
- Acceso a más profesionales con talento. Al poder trabajar sin límites geográficos, puedes encontrar a gente idónea para la empresa en cualquier parte del mundo, lo que también implica una mayor diversidad.
- Mayor conciliación con la vida familiar (horarios flexibles). El trabajo por objetivos aumenta la productividad de los empleados y si, además, se puede disfrutar de horarios flexibles para que el empleado trabaje cuando más motivado se encuentre, ya sea por no tener ninguna preocupación familiar o por cualquier otra razón, los resultados pueden ser óptimos para la compañía.
La comunicación, un gran aliado
Sin embargo, el teletrabajo y los entornos virtuales de trabajo también plantean una serie de retos que obligan a las empresas a “reinventarse” en cierta medida. Con personas trabajando desde diferentes puntos del planeta, la comunicación interna se ha convertido, más si cabe, en uno de los pilares fundamentales de toda compañía junto con la analítica de objetivos y resultados. Para suplir los beneficios de la presencia física, la comunicación interna debe impulsarse para conseguir que el empleado siga identificándose con la empresa, se autogestione sus propios objetivos, y sepa coordinarse con el resto de los equipos para evitar una menor productividad e ineficiencia laboral.
